Ayudas para emprendedores

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Muchos piensan que la mejor solución para no estar parado y salir del paro, es ser emprendedor, crear tu propio empleo. Cuantas veces no habremos oído esto.
Para algunos crear su propia empresa supone cumplir su sueño, además esto supone promover el auto empleo. Tendremos que tener en cuenta que no siempre es fácil y siempre crear una franquicia es ventajoso. Además, hay numerosas ayudas que nos ofrecen distintos organismos públicos. Algunas de estas ayudas, bonificaciones y subvenciones son:

Tarifa plana para nuevos autónomos
Es una de las más novedosas propuestas para el auto empleo. Esta subvención ayuda a reducir la cuota de la Seguridad Social mensual para trabajadores autónomos durante los primeros 6 meses. Esta ayuda, surgió en 2013, cuyo objetivo era promover el autoempleo en jóvenes menores de 30 años. Pero en 2014 se amplió para aquellas personas de cualquier edad, que desean crear autoempleo.
Esta ayuda, pretende una reducción del 80% en los primeros 6 meses, un 50% en los 7 meses hasta cumplir su primer año siendo autónomo y un 30% hasta los tres años.
Los únicos requisitos para poder obtener esta ayuda es no haber estado dado de alta en autónomos en 5 años anteriores a dicha ayuda y no estar trabajando por cuenta ajena.

Reducción fiscal para nuevos autónomos
Esta ayuda llega en el 2015, y permite una deducción en la retención profesional de los autónomos dados de alta por primera vez, siendo del 9% del IRPF. Esto, se aplica inmediatamente sobre las retenciones de autónomos durante el primer año hasta 3 años.

Ayudas para el autoempleo a desempleados
Su finalidad es la promoción del autoempleo. Una de las finales que tiene esta promoción de empleo es reducir desempleados, por ello hay dos tipos de ayudas para que estos apuesten por el empleo por cuenta ajena. Una de estas ayudas consiste en dar bonificaciones a nuevos autónomos, y las ofrecen las Juntas Autonómicas. Algunos de los requisitos, entre otros, para poder disfrutar de la ayuda es estar empadronado en el lugar donde se ofrece la ayuda.

Capitalización del paro
Hasta el año 2014 este tipo de ayuda solo era destinado a varones hasta 30 años de edad y a mujeres y personas discapacitadas hasta 35 años. Consistia en el cobro de la prestación por desempleo que se destinaría a emprender una empresa. A partir de este año (2015), todo desempleado puede solicitarlo, siempre y cuando sea para emprender.

Fomento local, territorial, de industrias o sectores
Años atrás, se inició varias iniciativas para promover el desarrollo de ciertas zonas rurales, o de aquellos sectores o trabajos que estuvieses en zonas rurales.
El objetivo de este, era conseguir a través de ayudas para trabajadores por cuenta ajena (autónomos) el inicio y puesta en marcha de su actividad empresarial. Esta ayuda, es una muy buena idea para aquellos que deseen emprender un negocio sin saber de qué, esperando que funcione.

Emprendiendo y contratando
En España actualmente abrir un negocio sin ayudas es difícil para aquél autónomo que trabaja solo, pero más difícil lo es para aquellas empresas que tienen que contratar a trabajadores desde el momentos en el que abren. Hay dos opciones para reducir gastos.

Tarifa joven: para contratación de jóvenes
Es una ayuda económica que permite una reducción de un 100% de cotizaciones para aquellas empresas que contratan a empleados menores de 30 años.
El contrato debe ser como mínimo de 6 meses. Sin embargo, si el contrato es de media jornada o reducida, el trabajador debe tener un horario que sea de mínimo 50% de horas con respecto a un trabajador normal.

Bonificación por contratación de mayores de 45 años

Aquellas personas menores de 30 años, pueden acceder a una ayuda económica de 100% encuanto a reducción de cuotas de la Seguridad Social por cada trabajador contratado que sea mayor de 45.
Se beneficial de dicha bonificación aquellos que no tengan otros oficios y siempre y cuando el contrato sea de cómo mínimo de 18 meses. Otro de los requisitos, es que el trabajador llevase en el paro más de un año.

Las ayudas no están siempre.
Es un error pensar que las ayudas sirven para “mantener” a la empresa, una idea muy alejada de la realidad.

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